Sí, lo sé, me repito nuevamente por estas fechas. Pero todo tiene su justificación. Unos habéis llegado más tarde que otros a este blog y, además, en una serie en la que trato de desnudar las escenas cinematográficas que, en un sentido u otro han impactado mis retinas, Smoke, Paul Auster, Brooklyn y Harvey Keitel, siempre tendrán un espacio en mi corazón. Por otra parte este, y no otro, es el momento de esta película.